Luis Felipe
La leyenda de LUIS FELIPE comienza en 1893 con el hallazgo en una bodega de La Palma del Condado de unas barricas de roble que contenían un brandy envejecido distinto a todo lo conocido hasta entonces.
Aquellas barricas casi olvidadas estaban señaladas con la mención LUIS FELIPE por haber sido reservadas para el Duque de Montpensier, hijo del Rey de Francia Luis Felipe I, que residió en el sevillano palacio de San Telmo hasta 1890.
Desde su descubrimiento hace más de un siglo, LUIS FELIPE ha mantenido su magnífica gama de excelencias gracias a la crianza artesanal y a una producción muy limitada.
LUIS FELIPE envejece mediante el tradicional proceso de “soleras” y “criaderas” en botas de roble americano dispuestas en “cachones” o “andanas”, unas sobre otras.
El destilado más viejo se encuentra en las botas más próximas al suelo, llamadas por ello “soleras”, de las que se extraen pequeñas cantidades para el embotellado, sin vaciarlas del todo.
El contenido sacado se repone con destilado más joven de las botas del nivel superior, denominadas “criaderas”, en las que ha permanecido durante años.