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66942 – Yaiza Malvasia Semi

15,00

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100% Malvasía Volcánica

Esencia de Yaiza semidulce está elaborado exclusivamente con Malvasía Volcánica.

La vendimia se lleva a cabo con la uva sobremadura de forma leve, para alcanzar un buen equilibrio entre el dulzor natural de la misma y a la vez, poder obtener un vino fresco e integrado.

Amarillo pálido como el reflejo del amanecer, limpio y brillante, con tonalidades que denotan frescura y juventud.

Presenta gran intensidad aromática, con un carácter floral a jazmín o azahar, que recuerda las características de una malvasía con mayor nivel de madurez.

Destaca el balance entre el dulzor y la frescura. Estamos ante un vino con alta persistencia aromática y paso fácil que invita a seguir disfrutándolo.

Yaiza semidulce es el compañero perfecto de quesos de curación media a alta y postres a base de frutas.

Marca

Vega de Yuco

Vega de Yuco es una bodega tradicional Canaria que destila autenticidad e innovación. La bodega nos descubre unos vinos genuinos, muy expresivos y con personalidad única. Integrada en el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Vinos de Lanzarote, combina desde hace más de dos décadas: gran tradición artesanal, tecnología e innovación, para crear unos vinos de una calidad extraordinaria en sus diferentes gamas. En La Geria Lanzarote, una ubicación privilegiada en la isla de Lanzarote. La bodega, rodeada de volcanes, se sitúa en mitad del lomo de Tese, a 1 kilómetro del pueblo de Masdache y en dirección al municipio de Tías, junto al Parque Natural de los Volcanes y al Paisaje Protegido de La Geria. En un paraíso como la isla de Lanzarote que el artista y escultor Canario, César Manrique, supo definir así, «Para mí, era el lugar más bello de la tierra…y me di cuenta de que, si ellos eran capaces de verlo a través de mis ojos, entonces pensarían igual que yo». Cuando las erupciones volcánicas de Timanfaya arrasaron la tierra fértil, entre 1730 y 1736. Los agricultores, con el fin de preservar la humedad y proteger a las plantas de unas condiciones climatológicas tan extremas, cubrieron con lava fragmentada, lapili, la superficie de cultivo. De este modo renace la isla de las cenizas volcánicas y el cultivo de la vid con variedades únicas y exclusivas como la Malvasía Volcánica. Los viticultores, héroes que no solo buscaban la excelencia sino que la encontraron. Indagando sin miedo, con valor y con el esfuerzo y pasión que poseen los que conocen su entorno y lo respetan. Topándose con la entrada que distingue y diferencia lo extraordinario de lo que no lo es. Excavando profundos hoyos para poder llegar a la tierra fértil donde plantar la vid. Desarrollando de este modo el arte de hacer vino. El hilo conductor que une el cielo con la tierra. El abismo con la cumbre. Utilizando los recursos naturales y técnicas de elaboración y cultivo autóctonas. Socavando en ellos mismos, en lo más recóndito de su corazón al tiempo que en las entrañas del terreno, su tierra Canaria. Entendiendo que el carácter, respeto y cariño de sus manos, es el que removería con mimo y pasión un suelo extraordinario y singular declarado Reserva de la Biosfera y Geoparque Mundial de la Unesco. Las uvas de Lanzarote con denominación de origen (D.O.). El secreto de una fruta con nombre y apellidos; variedades prefiloxéricas propias de la isla. Cepas que confieren a nuestros vinos la excelencia en la Malvasía Volcánica y la Listán Negro, predominantes en nuestras elaboraciones, así como en otras como la uva Diego y Moscatel. Una materia prima artesanal transformada en un vino extraordinario. Porque al profundizar en lo misterioso de la propia vida la naturaleza más sabia los descubriría no solo lo que allí había sino lo que podría llegar a haber. Un fenómeno de la naturaleza inimitable que daría lugar a un patrimonio vinícola excepcional y único; vides, lava y volcanes. Un maridaje perfecto de dedicación, esfuerzo y pasión. Para que la experiencia se quedase quieta, fija, inmovible en la retina de los que ven más allá de los que miran. Instante éste en el que: «vino, paisaje y bodega» se mezclan en el paladar, convirtiéndose en tradición, cultura y arte. Solo apto para los que esperan lo inesperado. Para aquellos que se descubren ante un espacio tan abrumador y sublime. Desde Robert Louis Stevenson, «[…]elegancia en el paladar», pasando por Herman Melville que hizo referencia a su, «calidad», hasta William Shakespeare, «[…]un vino maravillosamente penetrante». Pero hay que llegar hasta aquí y dejarse conquistar, para que no siempre seamos nosotros los que elijamos, sino que sea el propio vino de Bodegas Vega de Yuco el que nos elija a nosotros.