En Bodegas Iturria, llevábamos años escribiendo una bonita historia, hecha de vino tinto, fiel a la larga y fecunda tradición de Toro. Pero cuando pensábamos que ya lo habíamos contado todo, cuando pensábamos que nuestro destino era seguir relatando ese delicioso mito año tras año, de pronto, apareció QUIBAN, un verso de vino blanco, único, largo, profundo… un verso que, al instante, nos enamoró perdidamente.